Se trata de un contenedor especial que recibirá envases con desechos plásticos para su posterior reciclado.
“En el marco de la emergencia climática continuamos avanzando en acciones para la conservación del medio ambiente, con el fin de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Todo esto lo hacemos mediante la economía circular, ya que son distintas organizaciones las que participan de esta acción. El plástico que recuperamos de las botellas es transformando por emprendedores mendocinos en madera plástica, postes para viñas y todo tipo de mobiliario”, expresó el intendente Suarez.
De esta manera, los vecinos de la Ciudad podrán depositar en este rulero los diferentes residuos plásticos que actualmente tienen una serie de dificultades a la hora de ser reciclados. Las “botellas de amor” serán entregadas a Maderas Plásticas, emprendimiento de triple impacto con quiénes la Ciudad viene trabajando en diversas iniciativas orientadas a la gestión sostenible de residuos plásticos.
Esta acción forma parte del Programa de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos implementado por el municipio. Esto, junto con la separación en origen y recolección diferenciada de residuos secos reciclables, busca reducir los gases de efecto invernadero derivados de la generación de residuos.
Asimismo, en las próximas semanas se inauguraran nuevos ruleros de este tipo para ampliar los espacios de reciclaje. Con esto se busca aumentar la conciencia ambiental ciudadana brindando herramientas para que los vecinos puedan realizar prácticas sustentables cotidianas.
Además, a través de esta acción, se generará una ayuda social y económica a la Fundación Notti, que trabaja para beneficio del Hospital Pediátrico Dr. Humberto J. Notti. Esto se articulará con la entrega de Maderas Plásticas de un monto financiero correspondiente al peso (kg) de las botellas de amor a la fundación.
¿Qué son las botellas de amor?
“Botellas de amor” es un innovador modelo de reciclaje con amplios beneficios ambientales y sociales que se lleva a cabo en distintos puntos de Latinoamérica. En Mendoza, en octubre de 2019, un grupo de jóvenes conoció de esta iniciativa y comenzó a trabajar para implementarlo aquí. Poco a poco fueron ganando notoriedad y en tan solo meses han logrado recolectar miles de kilogramos de plásticos.
Carla Domínguez, una de las participantes de “Botellas de Amor”, agradeció la disposición de la Ciudad. “La idea es empezar a tomar conciencia y reducir su consumo. Está muy bueno que la municipalidad nos dé un soporte así para hacer la recolección más amplia”.
¿Cómo se arman?
Primero se deben separar los plásticos de un solo uso tales como: sachets, bolsas, cepillo y pasta de dientes, sorbetes y lapiceras sin cartuchos, entre otros. Luego en una botella de plástico limpia, se llena la botella con lo recolectado y lo deben llevar a los lugares de acopio.
