Por tal motivo, el municipio llevará a cabo una semana con actividades de concientización ambiental. Promotores ambientales visitarán a vecinos, vecinas y comercios para promover prácticas sostenibles y mejorar la calidad de vida de la comunidad.
La Ciudad se une a la conmemoración global del Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico, que se celebra cada 3 de julio, una fecha destinada para informar los efectos negativos de las bolsas plásticas en el medio ambiente, fomentar su reducción y uso responsable. Durante esta semana, promotores ambientales estarán recorriendo barrios y comercios para sensibilizar a la población sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y construir juntos una ciudad más sostenible.
En el marco de esta iniciativa, es importante recordar que la Ciudad de Mendoza implementó la normativa municipal 4000/2020, la cual regula y prohíbe el uso de bolsas de materiales no biodegradables y plásticos de un solo uso.
Según datos municipales, los plásticos representan unos 15.110kg diarios en cuanto a la generación de residuos sólidos urbanos. Esta medida se toma en consideración de la emergencia sanitaria, la situación económica y la necesidad de un cambio progresivo en los hábitos de consumo, así como en la adaptación de procesos para la producción y uso de materiales amigables con el medio ambiente.
El Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico se celebra desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó, en diciembre de 2017, una resolución que exhorta a los países a tomar medidas para reducir el uso de estas bolsas. Desde entonces, numerosos países y organizaciones han apoyado esta iniciativa, promoviendo alternativas sostenibles y alentando prácticas más responsables en el uso de bolsas plásticas.
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente estima que para 2050 la producción de bolsas y recipientes de un solo uso alcanzará las 12 millones de toneladas métricas de basura plástica. Este incremento significativo en el uso de plásticos para el transporte y almacenamiento de productos ha multiplicado su impacto ambiental negativo, subrayando la urgencia de adoptar medidas para mitigar estos efectos.
Con estas acciones, la Ciudad reafirma su compromiso con la protección del medio ambiente y la promoción de prácticas sostenibles, sumándose a la lucha global contra la contaminación plástica.