Este martes se ratificó la adhesión de la Ciudad de Mendoza a la “Declaración de París”, en el Microcine Municipal, donde se desarrolló una importante jornada de capacitación sobre prevención del VIH. Esta rúbrica, llevada adelante por el secretario de Gobierno Pablo Espina junto con el doctor Alberto Stella, director del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) para el Cono Sur, renueva el compromiso de la capital mendocina por mejorar el acceso a servicios integrales de salud y de erradicar el estigma asociado a dicha enfermedad, la tuberculosis y la hepatitis viral.
También participaron de este encuentro y se sumaron a la iniciativa el ministro de Salud y Deportes de la Provincia, Rodolfo Montero, los intendentes María Flor Destéfanis (Santa Rosa), Marcos Calvente (Guaymallén) y Edgardo González (Lavalle), entre otras autoridades.
El acuerdo global impulsado por ONUSIDA tiene como objetivo alcanzar los niveles 90-90-90 para 2030, donde el 90% de las personas con VIH conozcan su diagnóstico, el 90% de las diagnosticadas reciban tratamiento antirretroviral (TAR), y el 90% de quienes están en tratamiento logren la supresión viral.
La Declaración de París, creada en 2014 y actualizada en 2019, plantea que las ciudades deben liderar la acción contra la epidemia, promoviendo servicios de calidad que integren salud mental, prevención y diagnóstico temprano. Este enfoque integral, basado en evidencia científica, busca garantizar un acceso universal y mejorar la calidad de vida de quienes conviven con el VIH, promoviendo el enfoque “Indetectable = Intransmisible” como un camino para reducir la discriminación.
En este sentido, se trabajará para fortalecer servicios locales, colaborar con comunidades y priorizar un liderazgo que fomente sociedades equitativas e inclusivas. Así, se busca desarrollar políticas que ayuden a los sectores más vulnerables, promuevan la participación de personas afectadas y utilicen tecnologías innovadoras.
La Ciudad de Mendoza se encuentra acoplada, de esta forma, a una red global de ciudades comprometidas en compartir sus avances y experiencias, lo cual permite realizar reportes anuales sobre el progreso en la lucha contra el VIH, tuberculosis y hepatitis viral.
Asimismo, la capital mendocina es una de las primeras en Argentina que se sumó a esta iniciativa mundial, marcando un hito en su camino hacia la erradicación de estas enfermedades para 2030, en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.