Este viernes por la mañana, la dueña del pato Juan, Margarita Flores, se reunió con el intendente de la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suarez, y parte del equipo de la secretaría de Ambiente y Desarrollo Urbano. Allí, la vendedora de flores expresó que, luego de las repercusiones que generó el caso, consideró las razones expuestas por el municipio y manifestó estar de acuerdo en que el espacio propicio para garantizar la salud y el bienestar del animal es el lote en el que vive con su familia.
En el acta firmada por Margarita se informa que “el pato Juan se encuentra viviendo con ella y su familia en su casa, en el campo, protegido y con todos los cuidados de salud, alimentación y afecto que siempre le brindó a su familia desde que lo tienen consigo”.
“Con Margarita hemos tenido una linda charla sobre el conocidísimo y querido pato Juan. Ella me contó que Juan está muy bien, está en su casa desde el día que se fue de la florería y está muy bien cuidado por ella y por su familia. Ya acordamos que vamos a ir a visitarlo con el equipo de la muni, vamos a asistirlo con el equipo de Salud Animal para que reciba las vacunas que necesita, al igual que sus amigos, los dos perros salchicha”, contó Ulpiano Suarez.
El espacio donde está el pato, de unos 2000 metros cuadrados, está ubicado en el departamento de Maipú y cuenta hasta con una pileta en la que Juan se baña, según contó Margarita. A su vez, allí el ave comparte tiempo con otras mascotas y con la familia que lo crio, lo que le garantiza su seguridad y correcta alimentación.
Luego, el intendente completó: “También le ofrecimos acompañamiento para su puesto de flores en el Kilómetro Cero y colaboración en el armado de un nuevo corral exclusivo que tendrá Juan en su hogar en Maipú. Estamos convencidos que esta es la mejor solución del asunto, también para darle tranquilidad a Margarita, y el mensaje más importante es darle prioridad al bienestar y la tenencia responsable de animales”.
Por su parte, Margarita contó: “Vamos a hacer una jaula larga grande grande de 10 metros de largo, donde va a estar su fuente donde él se baña, más allá de que tiene también su pileta al lado, porque lo ponemos siempre ahí. Pero bueno ahora va a tener su lugar especial para él y va a estar bien a cuidado de nuestra familia y mía personalmente, porque yo soy la mamá de él, y bueno, también mi marido y mis hijos. Así que muchas gracias al municipio por preocuparse por la salud de Juan”.
De esta manera, el municipio se comprometió a colaborar con su equipo de veterinarios para asegurar la correspondiente aplicación del calendario de vacunación y los controles veterinarios pertinentes, tanto para el pato como para los animales con los que convive.
Sobre el caso del pato Juan
El animal se volvió una figura en el kilómetro cero de la capital provincial desde principios de este año. Sin embargo, su presencia sostenida en un entorno urbano no es compatible con los principios fundamentales del bienestar animal ni con las normativas vigentes que regulan la convivencia en el espacio público.
El municipio recuerda que el bienestar animal implica que los animales vivan en condiciones adecuadas para su especie. En este sentido, mantener aves de corral en un entorno urbano, con alto tránsito, ruido, contaminación y falta de contacto con su hábitat natural, puede generarles sufrimiento, estrés, problemas sanitarios y de comportamiento.
Asimismo, el Código de Convivencia Municipal y la Ordenanza Nº 2988/90 prohíben expresamente la tenencia de aves de corral en áreas urbanas. A esto se suma la responsabilidad que tienen los tenedores de animales frente a los posibles daños o molestias que puedan ocasionar a terceros, tanto personas como otras especies.
Los mismos expresan:
Ordenanza Municipal Nº 2988/90
En su Artículo 1º, inciso a) establece la prohibición en todo el ámbito del Departamento de Capital de: “La instalación de gallineros y la tenencia de todo tipo de aves de corral, cualquiera sea su cantidad, queda prohibida”. Asimismo, en el Art. 3° señala que en caso de constatarse una infracción a la prohibición señalada, se emplace a los responsables para que en el término de 48 h procedan a adecuarse a la normativa vigente, bajo apercibimiento de proceder a la aplicación de la sanción de multa, así como a la incautación de los animales y su traslado a dependencias municipales.
Por otro lado, el Código de Convivencia Municipal (Ordenanza Nº 3877/14) establece los siguientes puntos:
Artículo 57º – Responsabilidad de las personas poseedoras y propietarias de los animales:
La persona poseedora de un animal, sin perjuicio de la responsabilidad subsidiaria del propietario, es responsable de los daños, perjuicios o molestias que ocasione a las personas, a otros animales, a las cosas, a las vías y espacios públicos, y al medio natural en general.
Artículo 58º – Protección de los animales domésticos y de compañía. Las personas propietarias y poseedoras de animales domésticos deben mantenerlos en buenas condiciones higiénicas y sanitarias, de bienestar y de seguridad, de acuerdo con las necesidades propias de su especie.
Artículo 59º – Protección de la salud pública y de la tranquilidad y seguridad de las personas:
Las personas propietarias o poseedoras de animales domésticos o de compañía deben mantenerlos en buenas condiciones de seguridad, de modo que no se produzcan situaciones de peligro o molestia para la vecindad o terceros, debiendo adoptar las medidas necesarias a tal efecto.
Desde el municipio, se ha impulsado el cierre del acuario municipal y se trabajó en la liberación del tortugo Jorge. De la misma forma, también se ha actuado para que otros animales tengan una vida digna, respetando su naturaleza, como en la reubicación de patos y gansos del Parque Central a espacios más seguros, a raíz de una campaña ciudadana.
La Ciudad de Mendoza continuará promoviendo la tenencia responsable, el cuidado adecuado de los animales y la correcta utilización del espacio público, en línea con sus políticas de protección animal y convivencia urbana.










